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Una de las situaciones más emocionantes a vivir durante el embarazo es sin duda la de la ecografía. Las ecografías brindan a los padres un primer contacto virtual con sus hijos, además de las funciones de diagnóstico que ofrecen.
Para una madre, ver que el bebé está ahí, se mueve o la posibilidad de conocer su rostro es un momento único e inolvidable.
Mucho se ha hablado del tema de las ecografías y su idoneidad. En la actualidad, muchas madres no solo optan por las que ofrece la Seguridad Social, también visitan médicos privados donde les realizan las mismas pruebas ecográficas. Además, es posible realizar ecografías 4D a un precio asequible que nos ofrecen prácticamente una fotografía del futuro bebé.
Con todo esto sobre la mesa, la pregunta es clara: ¿cuántas ecografías son necesarias durante el embarazo?
Ecografías sí, siempre bajo supervisión médica
Durante todo el embarazo se han de seguir las pautas de los médicos y consultar solo a profesionales. Las ecografías se llevan a cabo mediante un dispositivo de ultrasonido, que muestra las imágenes del interior del cuerpo utilizando ondas de sonido de alta frecuencia.
Es uno de los procesos que nos aseguran que todo marcha bien y facilita un control detallado de todo el proceso del embarazo. Así pues, son pruebas médicas necesarias; según la SEGO (Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia) se recomienda efectuar al menos tres pruebas ecográficas durante el embarazo. Estas tres pruebas se realizan en diferentes etapas:
- Ecografía primer trimestre. Se realiza entre las semanas 11 y 13 y ayuda a detectar algún problema de tipo cromosómico, por ejemplo, Síndrome de Down. Se hace un estudio de la anatomía del feto, hueso nasal y corazón. También identifica problemas derivados de hipertensión o insuficiencia de la placenta.
- Ecografía segundo trimestre. En la semana 20 se realiza la segunda prueba, también llamada ecografía morfológica. La mayoría de problemas son detectados en esta prueba, pues el feto ya está casi totalmente formado. Se determina la posición del mismo y a través de cortes transversales es posible ver información sobre: cabeza, columna, cerebro, etc…
- Ecografía tercer trimestre. Esta última ecografía se realiza entre las semanas 32 y 36; en ella se obtiene información sobre la posición del bebé y su bienestar en general para el futuro parto: peso, posición del cordón umbilical y placenta, etc…
Ante un embarazo sin complicaciones estas tres pruebas son suficientes para garantizar un seguimiento adecuado del feto. En embarazos de riesgo, y previa recomendación de los profesionales médicos, es posible realizar alguna prueba más.
Y aunque el factor riesgo es bajo (no está clasificada como prueba invasiva), hay que tener cierta precaución con las ecografías en color, pues en exposiciones prolongadas generan un aumento de temperatura que podría afectar al feto en desarrollo. No obstante, los profesionales de la salud conocen este dato y las realizan en periodos breves de tiempo y solo cuando lo consideran necesario.
La regla de oro es seguir las recomendaciones de los médicos. Estos profesionales resolverán tus dudas sobre la frecuencia adecuada de realización de las pruebas ecográficas.